Taken, titulada en Latinoamérica como Venganza, se estrenó en el 2008 y fue una cinta de acción que rompió todos los moldes de esa época. La película, protagonizada por Liam Neeson en el papel de Bryan Mills, narra la historia de un agente de la CIA que usa toda su experticia para rescatar a su hija de unos secuestradores. La película dirigida por Pierre Morel, encargado de Distrito 13, Caza al Asesino y otras películas, recaudó unos 226 millones de dólares, siendo un éxito total, pues costó tan solo 25 millones de dólares.
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Una saga muy rentable
Al ser tan redituable se convocó a Olivier Megaton, quien dirigió El Transportador y otras películas de acción, para que se haga cargo de la dirección y el guion de esta nueva entrega de Taken. La película, en esta secuela, sigue a Bryan Mills, quien debe enfrentarse al padre del secuestrador de la primera parte. El éxito fue rotundo, la saga recaudó un total de 376 millones de dólares con un presupuesto de 45 millones.
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Para la tercera parte decidieron convocar nuevamente a Olivier Megaton, en esta película la fórmula cambia ligeramente y se enfoca en Bryan Mills escapando y tratando de resolver un crimen por el que lo acusan injustamente. Para esta cinta se contó con un presupuesto de 48 millones y la cifra recaudada superó los 320 millones de dólares.
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Aire fresco para la saga
Si bien la fórmula de Taken ha sido efectiva también ha sufrido un elevado grado de desgaste. Esto porque Liam Neeson, protagónico de las películas, ha participado en producciones muy similares en premisas y ejecución, por estudios cinematográficos y directores que quieren aprovechar la fórmula ganadora. Estas cintas son recientes como por ejemplo El pasajero, Una noche para sobrevivir, Non-Stop, Infierno blanco, Venganza bajo cero, El protector, Un ladrón honesto y Blacklight.
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Es por eso que se decidió explorar el pasado de Bryan Mills en una serie, la que se tituló Taken, como la película, esta está estelarizada por Clive Standen en el papel del legendario agente de la CIA y se nos narra las aventuras y problemas a los que debe de enfrentarse, y por los cuales logra adquirir esta serie de habilidades que lo hacen uno de los héroes modernos más peligrosos.
Motivado por este soplo de aire fresco es que Luc Besson, director de clásicos como El Quinto Elemento, Lucy y Valerian, decidió reestructurar la fórmula de la película, para salirse del cliché en el que han caído últimamente las películas de este género. Es por eso que creemos que Taken 4 será un épico y merecido final para la saga protagonizada por Liam Neeson.