10 películas que duran más de 3 horas pero que quisieras que no acaben nunca

Desde Titanic hasta El Señor de los Anillos: El Retorno del Rey te damos la mejor lista de películas que lograron atrapar a todos y llevarse varios premios.

La epopeya de tres horas es un tipo de película que ya no se ve mucho. Con los estudios cada vez más preocupados por el dinero y a menudo menos dispuestos a correr riesgos, se prefiere un entretenimiento más ajustado y fácil de digerir en lugar de piezas más largas y desafiantes que podrían tener menos atractivo.

Esto no quiere decir que las películas más largas no existan hoy en día, porque sí que existen. Vengadores: Infinity War dura dos horas y media, y las películas de Transformers se han acercado a las tres. Aun así, se trata de excepciones más que de reglas, y una duración cercana a las dos horas es lo que normalmente podemos esperar de nuestras películas.

Pero si retrocedemos en el tiempo 10 o 20 años más, las películas que duran más de tres horas son mucho más comunes, y su capacidad para incluir una tonelada de historia y desarrollo de personajes a menudo las convierte en las películas más celebradas que se estrenan en un año determinado.

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A veces sólo se quiere ver algo corto y sencillo, pero para esos momentos en los que te apetece hincarle el diente a un plato más sustancioso, no puedes equivocarte con ninguno de estos títulos.

10. Doctor Zhivago

Duración: 3 horas y 13 minutos

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La epopeya romántica de David Lean fue muy criticada en su estreno en 1965. Muchos no estaban contentos con la simplificación excesiva de una novela tan densa, y no les gustaba la forma en que subestimaba los horribles acontecimientos de la Revolución Rusa y la posterior guerra civil.

Y para ser justos, la película deja de lado la política de la historia y opta por centrarse más en el romance entre Yuri Zhivago y su interés amoroso, Lara Antipova. Pero si se juzga la película puramente por lo que es -un drama romántico- y se olvida lo que podría haber sido, hay mucho que apreciar.

Doctor Zhivago es una historia de amor bellamente rodada y hábilmente ambientada musicalmente (dos cosas que le valieron el Oscar) con el telón de fondo de uno de los periodos más problemáticos de la historia rusa. ¿Es un poco cursi a veces? Por supuesto. Pero con sus absorbentes personajes y su intenso romance central, la película hace más que suficiente para ganarse su larga duración.

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9. La Milla Verde

Duración: 3 horas y 9 minutos

La mejor interpretación en pantalla del fallecido Michael Clarke Duncan (y nominada al Oscar), La milla verde, de 1999, es una bestia curiosa, ya que la mayor parte de sus tres horas de duración tienen lugar dentro de una prisión.

Se podría esperar que esta singular ubicación hiciera que la película se volviera mundana, pero con una pizca de drama sobrenatural y algunos personajes realmente magnéticos, hay una sensación casi mágica que impregna la película y que ayuda a que las cosas se muevan a un ritmo relativamente rápido.

No es la mejor película carcelaria del director Frank Darabont (ese honor corresponde a The Shawshank Redemption, que dura 142 minutos) y a veces flaquea, pero The Green Mile es un conmovedor examen de los estereotipos prejuiciosos que se quedará en tu memoria mucho después de que hayan pasado los créditos. 

8. Titanic

Duración: 3 horas y 14 minutos

Titanic se ha convertido en una película bastante odiada con el paso del tiempo, especialmente en Internet. Las razones son abundantes: algunos la odian porque es popular, mientras que a otros les disgusta la forma en que monetiza un acontecimiento histórico devastador. Pero si se observa la película en su conjunto, es difícil negar que se trata de un hábil ejercicio de construcción de la trama, la cinematografía, la escenografía y la música.

Hay que decir lo inteligentemente que Titanic construye su romance central entre Jack y Rose. No se trata sólo de la lujuria (aunque ciertamente eso entra en juego más adelante), sino más bien de dos personas que luchan con sus propias identidades y que encuentran consuelo el uno en el otro.

Aquí es donde entra en juego la duración de la película, ya que podemos ver cada momento de la relación de la pareja, desde el principio hasta el triste final. Entendemos cómo y por qué se enamoran, y el hecho de que esto esté tan bien hecho hace que el trágico hundimiento del barco se sienta, bueno, más como un acontecimiento real -realmente podría haber habido dos amantes cruzados a bordo- en lugar de una básica destrucción cinematográfica descerebrada.

Y después de tres horas escuchando el emblemático tema de Celine Dion, buena suerte para quitárselo de la cabeza. 

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7. Malcolm X

Duración: 3 horas y 22 minutos

En lo que podría ser la batalla más extraña del fin de semana de apertura de todos los tiempos, Malcolm X, de 1992, se estrenó frente a Solo en casa 2: Perdidos en Nueva York y Drácula de Bram Stoker, mientras el trío competía por el codiciado número uno.

Al final, la película protagonizada por Denzel Washington quedó en tercer lugar, porque un biopic de tres horas nunca iba a tocar a su competencia más popular. En cambio, Malcolm X tuvo que conformarse con ser la mejor película de ese fin de semana, y una de las mejores de todo el año.

Con una interpretación fenomenal de Washington, una narración realmente conmovedora y una secuencia final increíble, se trata de un retrato satisfactorio de un hombre inspirador e intrigante que se niega a endulzar nada, por lo que es una experiencia estimulante que se pasa volando. 

6. El Lobo de Wall Street

Duración: 3 horas

La película biográfica de Martin Scorsese de 2013, que apenas llega a las tres horas, es esa rara epopeya que no parece larga mientras se ve.

El lobo de Wall Street está concebida con una energía tan rápida y un sentido del humor tan inteligente que su duración pasa fácilmente, y es una de esas películas que puedes poner en cualquier momento y disfrutar. Eso no es algo que se oiga a menudo sobre una película de 180 minutos.

Eso es un testimonio de la habilidad de Scorsese detrás de la cámara, así como de Leonardo DiCaprio delante de ella. El director hace que su historia fluya sin ningún tipo de retraso, y su protagonista se deleita en la profunda locura de las travesuras ilegales de su personaje, hasta el punto de que puedes sentir literalmente que el actor disfruta de cada minuto.

Y eso hace que nosotros disfrutemos con él.

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5. El Cazador De Ciervos

Duración: 3 horas 3 minutos

 

Aunque el director Michael Cimino cayó en desgracia con la pésima La Puerta del Cielo dos años después, El Cazador De Ciervos, de 1978, es la prueba de que tiene la capacidad de contar una historia con garra y que blanquee los nudillos, algo que no pudo aprovechar al hacer su hinchada y desordenada continuación.

El Cazador De Ciervos sigue a un grupo de gente de clase trabajadora de un pueblo pequeño cuyas vidas cambian para siempre por la guerra de Vietnam. Es una película muy larga, pero gracias a que es capaz de incluir numerosas y prolongadas secuencias de tensión -entre ellas las escenas de la ruleta rusa- siempre hay algo convincente en la pantalla que mantiene la atención, hasta los créditos finales.

No es necesariamente una película "agradable", y sus personajes a veces parecen caricaturas, pero es increíblemente conmovedora, y la intensidad de las interpretaciones de Robert De Niro y Christopher Walken es asombrosamente poderosa.

4. Lawrence de Arabia

Duración: 3 horas y 36 minutos

Lawrence de Arabia, una de las pocas películas que ha obtenido una puntuación perfecta de 100 en páginas web de críticas y reseñas de cine, rara vez está ausente de las listas de las mejores películas de su década, así como de las mejores películas de todos los tiempos.

Y eso está totalmente justificado, ya que, aunque se siente un poco anticuada debido a algunos diálogos cursis y a una imagen increíblemente apagada, emane clase y sofisticación, como si fuera una reliquia perfecta de una era olvidada de éxitos de taquilla muy inteligentes, pero todavía muy entretenidos.

La película sigue el épico viaje de T. E. Lawrence a lo largo de la primera guerra mundial, mostrando su lucha interna entre su lealtad al ejército británico y sus nuevos aliados en el desierto de Arabia.

El alcance y la escala de la película son realmente fascinantes para algo que se hizo en los años 60: hay ruidosas batallas a caballo a gran escala, y planos constantes y amplios sobre las vistas arenosas del desierto de Arabia. Lawrence de Arabia es un visionado esencial, y aunque supone una gran inversión de tiempo, es una de esas películas que hay que ver.

3. La lista de Schindler

Duración: 3 horas y 15 minutos

En 1993, Steven Spielberg estrenó tanto Parque Jurásico (junio) como La lista de Schindler (diciembre). Que quede claro.

No hay mejor conjunto de películas que demuestren por qué es uno de los mejores cineastas de la historia. ¿Hay algún otro director capaz de realizar en el mismo año un estimulante y aterrador éxito de taquilla sobre dinosaurios voraces, así como una oscura y conmovedora historia ambientada en la Segunda Guerra Mundial sobre un empresario alemán que salva a los judíos del holocausto?

Una de las cosas más notables de La lista de Schindler es cómo es capaz de mezclar el horror de la guerra con un auténtico sentimiento de esperanza, algo que se retrata visualmente con el uso de una paleta en blanco y negro que contrasta con el rojo intenso del abrigo de una joven. Es una película reflexiva y brillantemente interpretada, que le valió a Spielberg la estatuilla al mejor director en los Oscar de 1994.

2. El Señor de los Anillos: El Retorno del Rey

Duración: 3 horas y 21 minutos

El Señor de los Anillos: El Retorno del Rey ganó los once premios de la Academia a los que estaba nominada -incluyendo el de mejor película-, algo inaudito para películas de esta envergadura y género.

Mientras que los Oscars suelen premiar las películas de arte y ensayo más pequeñas, El Retorno del Rey es una película grande y emocionante en la que un elfo mata a un elefante con un arco y una flecha. La forma en que combina los efectos magníficos, la acción trepidante y la emoción que destruye el alma es realmente magnífica, y merecía totalmente cada una de las estatuillas que ganó.

Dado que tenía que cerrar varias historias -la búsqueda de Frodo y Sam para destruir el Anillo Único, el legítimo reinado de Aragorn-, se gana cada minuto de su enorme duración, y aunque se podría argumentar que debería haber terminado 15 minutos antes, era importante que cada personaje importante recibiera una conclusión adecuada (a veces larga) para su historia.

Si quieres una versión aún más larga, la edición extendida añade un montón de escenas extra, pero no te pierdes nada importante si te quedas con el corte normal.

1. El Padrino II

Duración: 3 horas y 22 minutos

Una de las mejores secuelas de la historia, por muchas razones, El Padrino II es la mejor obra del director Francis Ford Coppola, y eso es mucho decir para el responsable de Apocalypse Now, El Padrino y La conversación.

No sólo es entretenida, sino que consigue llenar adecuadamente sus 202 minutos de duración con una narrativa no lineal que consiste en una historia que sigue a Michael Corleone (Al Pacino) y una precuela que sigue a su padre, Vito (Robert De Niro).

Este salto hacia adelante y hacia atrás puede hacer que la película resulte un poco confusa a veces, pero eso es realmente una objeción; la actuación y la escritura que se muestran aquí están entre las mejores de la historia del cine, y hay un amplio consenso en que Pacino debería haberse llevado a casa el premio de la Academia de ese año para acompañar las victorias de Coppola en guión adaptado y dirección.

Como aficionado al cine, una de las mejores maneras de pasar un día libre es abastecerse de comida y ver las dos películas del Padrino -puedes saltarte la tercera- una detrás de otra. Será una sesión larga, pero es imposible no sentirse recompensado por su tiempo.

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