Celebridades de la Gen Z que nos enseñan lo que es la verdadera belleza

La modelo sursudanesa-australiana reveló lo difícil que fue encarar los estándares de belleza: "Me acosaban por el tono de piel, pelo y, sobre todo, por su hueco entre los dientes. Desde el momento en que pisé la pasarela, pensé: 'Esto es lo que quiero hacer'. ... Ahora me siento y sonrío. Me encanta demostrar que la gente se equivoca".

Alana sufrió mucho por su peso y en una entrevista con Vogue lo reveló: "No entiendo por qué la gente piensa así. Solo porque tengo un poco más de carne en los huesos, ¿deben odiarme? Nunca entenderé la crítica del cuerpo. O sea, sé que soy hermosa y que tengo un cuerpo estupendo, así que no me importa".

Amandla sufrió de racismo por su tipo de cabello y para InStyle lo reveló: “Cuando rodaba ‘Los Juegos del Hambre el equipo de estilistas no sabía cómo peinar a los negros. También expresaron abiertamente su frustración porque era demasiado difícil. Yo no estaba tan acomplejada, pero recuerdo claramente que sentía que tenía un pelo inaceptable, que le pasaba algo”.

Barbie llegó a Euphoria para darle su toque y romper los estándares de belleza. Ella contó lo siguiente sobre los granos: “No se hizo nada especial para deshacerse de los granos. Hacemos de adolescentes, a los adolescentes les salen granos, ¿cuál es el problema? Incluso se acentuaron más estas imperfecciones para que sea más realista”.

Ella reveló para Vogue lo siguiente: "Yo era la hermana más fea. Era la morena. No era tan divertida como Gigi, ni tan extrovertida. Eso es lo que la gente decía de mí. Con los años, me convertí en una buena actriz. Ponía una cara muy sonriente o muy fuerte. Siempre sentí que tenía algo que demostrar, pese a todas las inseguridades que tenía de joven”.

Camila, al igual que muchas celebridades, sufren acoso de los paparazzis y lo reveló en Twitter: "Hoy me he comprado un bikini nuevo, un conjunto bien bonito, me he puesto brillo de labios y no he comido nada demasiado pesado antes de meterme en el océano porque sabía que iba a ser toda una sesión de fotos. Nunca lo he pasado peor en la playa”.

Chlöe se sentía muy insegura de su cuerpo, pero reveló que con el tiempo aprendió a quererse: "Con la edad, he aprendido a apreciar de verdad mis curvas. Me encantan mis estrías. Cada vez que tengo una sesión de fotos, digo: 'No, no retoques las estrías, porque me gustan'".

En su entrevista con StyleCaster reveló lo siguiente sobre los trastornos alimentarios: "Empecé a ver cómo algunas personas que conocía personalmente llegaban muy lejos. Porque eso está muy visto en Hollywood. Les decían a las niñas que si vigilaban lo que comían y corrían, tendrían ese aspecto, y que deberían tener ese aspecto, y que esa era la imagen de la salud”.

La actriz ama la comida y habló sobre ello en Vogue: "Tuve un capítulo extraño al principio de mi carrera, pero fue porque no cumplía las normas. Creo que eso confundía a la gente, sobre todo en Hollywood. Creo que definitivamente me he puesto las pilas en ese aspecto. Me encanta la comida. Nunca adelgazo para tener un aspecto fantástico para un papel. Es más bien, ¿cómo habría vivido este personaje?”.

Sobre su tiempo en la pasarela dijo lo siguiente: “Que Jean Paul Gaultier me invitara a su último desfile de prêt-à-porter en 2015, no sólo para invitarme, sino también para ponerme un traje que no cubriera mucho Para él, hacerme sentir que quería que brillara de ese modo significó mucho para mí como joven modelo. Y sé que lo ha hecho por mucha gente".

El actor reveló lo duro que es ser solo un trozo de carne para la gente en Men’s Health: "Aprendes rápidamente que lo que la gente se lleva de esas películas es tu estatura y tu figura. Hay todo tipo de personas mayores en todo el mundo que sólo hablan de tu aspecto".

Lil Nas X siempre ha desafiado los estándares de belleza y se lo dijo directamente a la gente en Complex: "Siempre estoy probando cosas nuevas. Sea cual sea el medio, ya sea la música, los visuales, la moda o el maquillaje, me sumerjo por completo y me complazco, hasta el punto de hacer cosas que no había hecho antes".

Lili decidió revelar en Twitter que ella también ha sufrido inseguridades por su cuerpo debido a los compañeros “perfectos” que tenía en ‘Riverdale’. “He aceptado mi cuerpo y que no soy el tipo de persona que verías caminando por una pasarela durante la semana de la moda. Tengo los pechos más grandes, celulitis en los muslos y las nalgas, y mi vientre sobresale en vez de curvarse hacia dentro. Esto sigue siendo algo contra lo que lucho a diario”.

Molly decidió sacarse todos los arreglos que se hizo y para Cosmopolitan dijo lo siguiente: “Tenemos que dejar de normalizar el relleno, con cosas como 'paquetes Kylie Jenner'. Tenía 17 años cuando me operé los labios por primera vez, y me asusta pensar cómo será para una futura hija dentro de 10 años. A veces también olvido cuán jóvenes son mis seguidores”.

La cantante fue muy tajante con lo que se quiere ver en el medio y lo reveló para The Guardian: "Es duro para cualquiera crecer en estos medios de comunicación en los que se tiene la sensación de que, si no tienes rasgos europeos y el pelo rubio y los ojos azules, no eres tradicionalmente guapa. De hecho, tardé un tiempo en quitármelo de encima"

La actriz decidió hablar en Twitter sobre la problemática para los actores gordos y la gordo fobia: "No contratan a actores gordos para personajes gordos emblemáticos porque quieren una estrella de renombre. Casi no hay estrellas gordas de renombre porque a los actores gordos no se les permite subir en el escalafón".

Incluso dentro de los deportes los estándares de belleza son importantes y Simon Biles lo dijo en Twitter: "En la gimnasia, como en muchas otras profesiones, hay una competencia cada vez mayor que no tiene nada que ver con el rendimiento en sí. Me refiero a la belleza. No sé por qué, pero otros sienten que pueden definir tu propia belleza basándose en sus estándares”.

Willow reveló lo complicado que era ser afroamericana y tener un cabello diferente: "Como mujer negra, mi relación con el pelo y la piel tenía muchas capas mientras crecía; sin duda fue una curva de aprendizaje”. De un momento a otro se rapo y dijo que fue una decisión genial, ya que podía ser libre como quisiera.

La actriz desde pequeña tuvo problemas con sus cejas y el maquillaje llegando a revelar lo siguiente a Allure: "Cuando tenía 14 años, mamá tuvo que someterme a un tratamiento para deshacer lo que se me había metido en la cabeza. Como estar en la caravana de maquillaje, y que los maquilladores me pusieran las pestañas y dijeran: 'Ahí estás', como si no hubiera estado antes”.

La actriz más influyente del medio no fue ajena a los problemas y lo reveló durante la Beautycon del 2018: "Como mujer negra, como mujer negra de piel clara, es importante que utilice mi privilegio, mi plataforma, para mostraros cuánta belleza hay en la comunidad afroamericana. Supongo que podría decirse que soy la 'versión aceptable' para Hollywood de una chica negra, y eso tiene que cambiar".